Del Monasterio a la Casa de Ejercicios
mil años de historia
A tu disposición y disfrute
Fundación y primeros años
El Monasterio de San Salvador fue fundado en 1017 por los nobles asturianos Don Alfonso Suárez y su esposa Doña Cristilda.
Situado como un hito crucial en el Camino de Santiago, el monasterio no solo servía de asilo y sepultura, sino también de abrigo para los peregrinos.
La fundación oficial del monasterio se atribuye al rey Fernando I el Magno entre los años 1037 y 1065, marcando el inicio de su importancia religiosa y social.
Época de expansión
Durante el siglo XVI, el monasterio fue integrado en la Congregación de San Benito de Valladolid, lo que impulsó un período de renovación y expansión.
En el siglo XVII, se estableció un colegio de Filosofía, y en 1679, se iniciaron importantes reformas en la iglesia y otras dependencias, destacando la preservación de una torre y una portada de estilo románico tardío, elementos que aún perduran.
Decadencia y desamortización
La invasión napoleónica marcó el inicio de un período de declive para el monasterio. Aunque los franceses eventualmente se retiraron, el monasterio nunca logró recuperarse completamente.
En 1835, el abad Fr. Albito Petite cerró definitivamente sus puertas, obedeciendo al decreto de desamortización de Mendizabal.
El monasterio fue vendido y pasó a ser propiedad privada de Don Juan Abarca Sobrino.
Historia
En 1919, la Compañía de Jesús adquirió el monasterio, iniciando una serie de obras que transformarían el lugar en una Casa de Ejercicios.
Sin embargo, la expulsión de la Compañía en 1932 y la subsiguiente Guerra Civil Española afectaron profundamente al monasterio, utilizándose incluso como prisión durante el conflicto.
Tras la guerra, el Colegio de la Inmaculada de Gijón tomó un papel activo en la recuperación del sitio.
Reconstrucción y uso actual
La demolición del viejo caserón y la inauguración de una nueva construcción en 1977 marcaron un nuevo capítulo para el monasterio.
Hoy, sigue funcionando como Casa de Ejercicios bajo la dirección de la Plataforma Apostólica de Asturias de la Compañía de Jesús.
Además de su uso continuo para retiros espirituales, el monasterio conserva valiosos elementos arquitectónicos y artísticos que reflejan su rica historia.